Pomelo, cáñamo. El amargor ácido del pomelo se mezcla con la nota verde y ligeramente terrosa del cáñamo, creando una apertura sorprendente y adictiva. Una frescura inesperada que despierta la curiosidad y anuncia una fragancia compleja y sofisticada.

Geranio, pimienta negra. El geranio aporta un toque floral sutilmente especiado, mientras que la pimienta negra refuerza la dimensión viril y sensual de la fragancia. Un corazón vibrante y cautivador que revela la fascinante dualidad de Bad Boy.

Cuero, Vetiver, Madera de Guaiac. El cuero, intenso y sensual, se combina con la profundidad amaderada del vetiver y el guayaco. Una base potente y adictiva que deja una estela inolvidable y afirma la personalidad magnética de quien la lleva.

Desafortunadamente, las marcas suelen mantener en secreto la composición química exacta de los perfumes para proteger sus fórmulas únicas. Sin embargo, podemos deducir de la pirámide olfativa la presencia de ingredientes como el limoneno (presente en el pomelo), el geraniol (presente en el geranio) y probablemente moléculas sintéticas que contribuyen a la complejidad y durabilidad del perfume.

Bad Boy Le Parfum está dirigido al hombre moderno, audaz y seguro que abraza plenamente su personalidad. Un hombre que busca una fragancia que refleje su imagen, a la vez elegante y rebelde, sofisticada y provocativa. Una fragancia que refleja su fuerza interior y carisma natural.

Aunque su rica composición amaderada puede inclinarla hacia estaciones más frías como el otoño y el invierno, la presencia de notas cítricas y florales le da una versatilidad que permite usarla en primavera y también en las noches de verano.

Bad Boy Le Parfum es una fragancia ideal para veladas especiales, eventos importantes o simplemente para sentirse seguro y atractivo en el día a día. Su estela potente y cautivadora dejará una huella memorable donde quiera que vayas. Es el aroma del hombre que se atreve, que no pasa desapercibido y que asume plenamente su carisma magnético.