La apertura de Agua Fresca de Rosas Blancas es una explosión de frescura chispeante. La mandarina verde y el pomelo rosado aportan una vivacidad ácida, mientras que la grosella negra añade un toque afrutado ligeramente dulce. Esta combinación crea una introducción chispeante y alegre que despierta los sentidos.
Notas de corazón:En el corazón de la fragancia se revela la majestuosidad de la rosa blanca, reina indiscutible de este bouquet olfativo. Su fragancia delicada y empolvada se ve realzada por la presencia de lirio de los valles, que aporta un toque de verde y suavidad primaveral. El jazmín, con su aroma cautivador y sensual, añade una dimensión extra de feminidad y refinamiento.
Notas base:La base de Agua Fresca de Rosas Blancas es una mezcla armoniosa de notas amaderadas y almizcladas que le dan a la fragancia una profundidad y persistencia excepcionales. El sándalo cremoso y el cedro cálido se entrelazan con la suavidad envolvente de los almizcles blancos, creando una base sensual y adictiva que permanece delicadamente en la piel.
Composición química (información no disponible públicamente para esta fragancia específica) La composición química exacta de los perfumes generalmente se mantiene confidencial por las marcas. Sin embargo, podemos deducir de la pirámide olfativa la presencia de alcoholes, agua y una compleja combinación de moléculas aromáticas naturales y sintéticas que dan vida a la fragancia. Público objetivo:Agua Fresca de Rosas Blancas está dirigida a una mujer romántica, elegante y moderna. Ella aprecia la sencillez y la autenticidad, y busca una fragancia que refleje su personalidad gentil y refinada.
Estación:Esta fragancia es ideal para primavera y verano. Su frescura chispeante y sus delicadas notas florales combinan perfectamente con los días soleados y las noches cálidas.
Periodo de uso:Agua Fresca de Rosas Blancas es una fragancia versátil que se puede usar en cualquier ocasión. Ya sea para un día en la oficina, un almuerzo con amigos o una velada romántica, esta fragancia te envolverá en un aura de frescura y elegancia. Es lo suficientemente ligero para el uso diario, pero lo suficientemente sofisticado para ocasiones especiales. Regalarse o darse un capricho con Agua Fresca de Rosas Blancas es más que elegir un perfume, es abrazar un estilo de vida, una filosofía. Se trata de apropiarse de la elegancia atemporal y la frescura cautivadora de las rosas blancas.Es dejarse transportar por una fragancia que cuenta una historia de feminidad y refinamiento. Es un regalo precioso, un gesto de amor y cariño que dejará una huella olfativa inolvidable.